La artrosis es una enfermedad evolutiva y cambiante, y cada tipo de artrosis es diferente casi tanto como lo es cada paciente. Por ello, un grupo de científicos españoles ha realizado un estudio que se centra en el origen y la evolución de la artrosis, para poder clasificar la enfermedad en diferentes tipos.
Este grupo de especialistas hizo una clasificación de la artrosis según su origen, o lo que se conoce científicamente como la clasificación etiopatogénica de la artrosis, que la distingue en tres tipos:
- Artrosis de tipo I: la artrosis de causa genética, que tiene un importante componente hereditario.
- Artrosis de tipo II: es la artrosis que aparece por motivos hormonales; normalmente aparece tras la menopausia debido al bajo nivel de estrógenos.
- Artrosis de tipo III: la que aparece con la edad por el envejecimiento de las células del cartílago.
Además existen factores externos que condicionan a la artrosis, como por ejemplo la inestabilidad de las articulaciones, la obesidad o la diabetes. Por eso no será lo mismo la artrosis de una paciente en edad postmenopáusica que tiene sobrepeso, que la de un paciente que con artrosis de origen genético y que practica deporte, etc.
Poder clasificar todas estas variaciones tendrá una enorme importancia ya que permitirá dividir a los pacientes en diferentes grupos y ofrecerles tratamientos personalizados a largo plazo, ya que no todos los pacientes con artrosis son iguales.