El pasado 23 y 24 de octubre tuvo lugar en Barcelona el segundo Congreso dirigido a Pacientes con Enfermedades Reumáticas, organizado por la Sociedad Española de Reumatología.
Entre los temas que se trataron durante el congreso, destacaron cuatro áreas temáticas: la salud laboral y las diferencias entre discapacidad e incapacidad; la investigación y nuevos fármacos; el papel del reumatólogo hoy en día; y el paciente experto en su propia enfermedad.
Este último es un tema que a menudo destacamos en nuestro blog, ya que también en el caso de la artrosis, el autocuidado es una de las piezas clave para que los pacientes afectados por la enfermedad puedan ganar en calidad de vida. Para cuidar de nosotros mismos, el primer paso a dar es entender qué nos pasa. Por eso, tal y como destacan los expertos de la SER, resulta especialmente importante recoger información sobre la enfermedad, pero también sobre nuestro propio estado físico y psíquico.
Monitorización de los síntomas
Antes de acudir al médico, debemos saber bien cuáles son nuestros síntomas. Puede parecer sencillo, pero en ocasiones podemos pasar por alto algunos detalles que a la hora de diagnosticar una enfermedad resultan importantes.
Por ejemplo, si lo que tenemos es dolor en las articulaciones, deberemos tener en cuenta por ejemplo las siguientes cuestiones:
- ¿Cuántos días hace que padecemos dolor?
- ¿Nos duele siempre o el dolor aparece de manera intermitente?
- ¿Aparece el dolor tras estar en reposo, o en movimiento?
- ¿Cuáles son las actividades que más dolor nos provocan?
- ¿Qué actividades forman parte de nuestro día a día?
Monitorizar tanto nuestro estado físico como anímico día a día, significa hacer un seguimiento diario de nuestros síntomas, anotándolo en un diario si fuera necesario. Este es el primer paso a dar tanto en el diagnóstico como en el tratamiento de una enfermedad como la artrosis, ya que nos ayudará a entender el porqué de nuestros síntomas, pero también cuál es el tratamiento más eficaz, por ejemplo.