Perder peso ralentiza la pérdida de cartílago de rodilla en personas obesas, según un estudio que fue presentado el pasado 30 de noviembre durante la reunión anual de la Sociedad Radiológica de Norteamérica.
En este estudio participaron 506 personas con sobrepeso y obesidad con artrosis de moderada a leve, o factores de riesgo para contraer esta enfermedad. Los participantes fueron asignados aleatoriamente a tres grupos: un grupo de control que no perdió peso, a un grupo que perdió poco peso o a un grupo que perdió más del 10% de su peso corporal.
Después de un seguimiento de cuatro años, los investigadores llegaron a la conclusión de que una pérdida de peso significativa protegía de la degeneración del cartílago. Cuanto mayor pérdida de peso, mayor protección. El cartílago se deterioró mucho más lentamente en el grupo que perdió más del 10% de su peso corporal, en especial en las áreas de la rodilla que soportan peso. No obstante, en aquellas personas con una pérdida de peso de entre 5-10% no se detectó una diferencia significativa con respecto a los que no perdieron peso.
Una pérdida de peso significativa no sólo reduce la pérdida de cartílago de rodilla, sino que también reduce el riesgo de artrosis. Junto con ejercicio moderado, la pérdida de peso es una de las mejores formas de prevenir esta enfermedad. Es mucho mejor, afirman los expertos, que estas intervenciones sobre los hábitos de vida tengan lugar lo más pronto posible.
De cara al futuro, los autores del estudio planean analizar el papel de la diabetes, que se asocia directamente con obesidad, en la degeneración del cartílago. También prevén realizar un seguimiento de ocho años del grupo de pacientes y ver qué efectos puede tener el aumento de peso sobre la articulación de la rodilla.
Fuente: RSNA (Radiological Society of North America)
