La artrosis de rodilla sigue siendo una de las enfermedades reumatológicas con más prevalencia. A continuación, veremos una serie de sencillas medidas que pueden aliviar el dolor provocado por la artrosis de rodilla y/o ralentizar su progresión:
- Mejorar la alimentación. Evitar los alimentos ricos en grasas ayuda a reducir la inflamación y por tanto puede contribuir a disminuir los síntomas de la artrosis.
- Mejore la flexibilidad y tonifique la musculatura articular con ejercicios (como estos) o mediante la práctica de yoga o taichí.
- Aplicar frío o calor. Aplique paños con frío o calor en función de los síntomas. Si la articulación está caliente o enrojecida, la aplicación de frío aliviará los síntomas. Si, por el contrario, está rígida, un poco de calor puede relajar la articulación y reducir el dolor.
- Calzado. Un calzado adecuado es importante para aliviar los síntomas de la artrosis e incluso ralentizar su progresión. Utilice calzado cómodo, con un poco de talón y suela gruesa.
- Evite el roce entre rodillas al dormir. En fases más avanzadas de la artrosis, el roce entre rodillas puede provocar dolor y alterar la calidad del sueño. Esto puede evitarse con un cojín ortopédico o un cojín pequeño insertado entre ambas articulaciones.
De cualquier modo, siempre debe consultar con su reumatólogo o médico de cabecera, que le recomendará los métodos de tratamiento y prevención más efectivos en función de su caso.